jueves, 16 de abril de 2009

Mi primera comunión

Y esta soy yo, con un vestido impuesto por mis monjitas, no querían nada de florituras, pero claro, solo hicieron caso dos familias, y el resto de las niñas fueron como a sus padres les dieron la gana. Dos años mas tarde cuando le tocó el turno a mi hermana, mi madre ya sabía lo que tenía que hacer, eso, caso omiso. A mí, la verdad, es que es lo que menos me importó, nunca he sido presumida, lo que más me molestó fué el dolor de pies que me producían mis sandalias nuevas, aunque mi madre se empeñara en creer que lloraba por el vestido, no mamá, te lo vuelvo a repetir, fueron las sandalias. LLegé al fotografo llorando, el hombre me echó Reflex, o matamoscas, no lo se, el caso es que me produjo cierta cosquillita y ya pude poner esa pequeña sonrrisa para la foto que veis. Por tanto, no me brillan los ojos de emoción, no. Bueno podria contar algunas cosas mas de ese "feliz dia" pero ya lo dejaré para otra ocasión.
El rosario es regalito de mamá, ( tampoco usado ese día ) me lo entregó el día que confesé por primera vez. Por cierto, tuve que buscarme algunos pecados, porque claro, con 7 años, que pecados iba a tener, no decía palabrotas ni tan siquiera... ¿porqué sería tan buena? ahora me encontraba en un apuro, menos mal que de pequeña me peleaba con mi hermana..... algo es algo.
Esta preciosidad de librito me lo regaló mi abuela Pepa, algunos meses antes de la comunión, luego por circunstancias ( capricho de las monjas) ninguna niña pudo llevar libro, ni rosario, ni adornos superfluos, gracias a todas ellas, por este detalle y por muchos mas que guardo muy a mi pesar.
Estos dos libros, junto con otro más de cuentos que ahora no encuentro, son los únicos regalos que conservo del dia de mi primera comunión. El caso es que ni me acuerdo del resto de regalos, alguna que otra muñeca, eso si, y para más detalle, recuerdo que la que me regaló mi vecina, se la regalaron a su vez a su hija el año anterior, es una pequeña indiscreción, pero los niños pequeños no son tan tontos como creen algunos adultos.

7 comentarios:

Brownie dijo...

Pues estabas muy guapa y muy de moda con tu flequillo. Me encantan las fotos en blanco y negro.
Yo no recuerdo todos mis regalos... pero también tuve el librito, la biblia y la muñeca vestida de comunión...
Ah! Y que sepas que yo sí lloré por el traje porque pegaba unos picotazos que pa qué!
Te he dejado una cosilla en la última entrada de mi blog, espero que te guste.

Besillos!!

MT dijo...

Has preparado algo muy bonito, compartiendo con quien quiera verlo.

Mi primera comunión, fué como cualquier comunión de esa época, me acuerdo que la celebramos en mi casa y se aprovecho el que mi primo la hizo al mismo tiempo y se organizó todo en mi casa. Recuerdo que había muchisima gente. Me regalaron muchas cosas, pero me llamó la atención algo curioso para mi... Me regalaron un billete de 100 Ptas. Eso era ¡no sé! muchisimo, lo máximo que yo habia manejado hasta entonces era 5 Ptas. para comprar algún sobre de soldaditos en el Kiosko.

Bueno pero todo eso son historias y ahora la que cuenta es la tuya.

Te felicito por esta magnifica y entrañable entrada.

un salubrazo

El Kioskero del Antifaz dijo...

A mí mis padres me preguntaron sí quería hacerla... cometí el error de responder que si.

El motivo que les di, era que quería los regalos. Puafff... vaya chasco de regalos: cubiertos con mis iniciales, un reloj de pulsera, un diario con las tapas nacaradas...

El día que me confesé iba acojonado. creía que el cura iba a darme algún capón por todos mis pecados, pero afortunadamente no consideró muy grave el hecho de que les hubiese contado alguna mentirijilla a mis padres.

Bonita entrada María José. Me has hecho recordar mi comunión, que sinceramente... la tenía muy olvidada.

y no sé si fue mata moscas lo que el fotografo te echó en los pies, pero están muy, muy guapa ;-)

Besos.

Itzi dijo...

¡¡ Que me he emocionauuu!!! Jajaja..Que bonito y que dulce.
Buenoooo, Estas guapisima en tu foto de 1ª comu, es preciosa.
Para tu consuelo te diré que hemos debido de ser de la misma pasta de pavas (con perdón) de pequeñas, porque las monjas de mi cole....bua!! siempre pensé que irían al infierno cuando murieran, y resulta que siguen vivas ... ¡¡Impresionante!! fijate, ahora que han quitado el infierno!!Jajjaa

También nos mandaron ir de calle, y la única que fué de calle fuí yo, todas con el traje de bomba novia...La verdad es que ahora me veo en las fotos e iba la más guapa...
Ha sido un recuerdo precioso el que nos has puesto, Felicidades por tu relato tan clarito y por los regalos que conservas de gente tan querida para ti, por cierto que el rosaurio es precioso. Un saludote.

Maria dijo...

Bonita historia por lo que tiene de personal, nos enseñas una parte de tu vida con sentimientos y recuerdos muy enfrentados y ese toque de que no está todo contado :)
Yo llevé el vestido de mi hermana con un volante añadido (habia que ahorrar que éramos muchos :) ).
Me lo sacaron nada más llegar a casa, pero no me dolió mucho, pues estrenaba un precioso pichi que me hizo más ilusión que el vestido :)
Besos,

Anónimo dijo...

Hola María José, qué bonito relato, me encanta escuchar los recuerdos infantiles de otros, hacen que los míos se disparen. La foto es muy bonita.

Yo sí que me sentí un poco avergonzada de mi vestido. Mi madre, imagino que ajustándose al presupuesto familiar, me lo compró de lo más sencillito, de altura hasta media pierna y en un tono crudo. Mis amigas fueron todas de largo, como novias, incluso con velo y limosnera. No lo recuerdo como un día especialmente feliz, quizás un día un poco más estresante que otros por el hecho de tener que saberme todas las oraciones.

maite dijo...

Hola maria jose,si que estabas guapa el dia de tu comunion con esa carita de buena como para tener pecados.que recuerdos y que ilusion que llegara el dia verdad?mi comunion no fue el dia mas feliz de mi vida pero bueno..!gracias por tu blog!